Por: Matias Cincunegui -Técnico mecánico industrial – Certificado GMP-
Las BPM (Buenas Prácticas de Manufactura) son una serie de prácticas y procedimientos que se encuentran incluidos en el Código Alimentos Argentino (CAA) desde el año 1997, son obligatorias para los establecimientos que comercializan sus productos alimenticios en el país y suman valor agregado a la hora de exportar. Son una herramienta clave para lograr la inocuidad de los alimentos que se manipulan.
La inocuidad de los alimentos es una responsabilidad ampliamente compartida entre todos los que componen la cadena agroalimentaria.
Aunque está bien establecido, la normativa nacional e internacional lo reconocen taxativamente, siendo los elaboradores los principales responsables por la inocuidad de los alimentos que producen y cumple un rol fundamental la Autoridad Sanitaria con obligaciones bien claras.
Dentro de sus responsabilidades, del nivel jurisdiccional que sea, se encuentran el proporcionar un marco legislativo claro y consistente que acompañe la implementación de las BPM en todos los establecimientos que elaboran, expenden y comercializan alimentos, la implantación y la ejecución de sus tareas con metodologías acordes a lo que se quiere investigar / prevenir y la planificación de las tareas de control buscando que las mismas se enfoquen prioritariamente en la prevención de peligros y riesgos con un enfoque integral de la cadena agroalimentaria. Siempre que sea posible, la inclusión participativa de la comunidad en las tareas de prevención y promoción resulta un aliado para la consecución de los objetivos buscados.
Y esta responsabilidad se extiende hasta el consumidor, proteger su salud es el gran objetivo. Es por eso que siempre se busca optimizar y mejorar las prácticas diarias para que se mantenga la inocuidad de los alimentos durante todo el proceso de manipulación y prevenir las ETA (enfermedades transmitidas por los alimentos)
A la hora de exportar, los distintos mercados internacionales tienen requisitos diversos, entre los cuales es común denominador “el control de calidad realizado en base a normas internacionales”
En ésta área, la de los alimentos, sumar la BPM, es incluir un valor agregado.